Tanta paz lleves como descanso dejas.

Recientemente ha fallecido un longevo genocida que recibió el premio Nobel de la Paz en 1973. Me refiero al Ex-secretario de Estado y Ex-consejero de Seguridad Nacional de los Estados Unidos, Henry Kinssinger. La Hispanidad no puede tener más que un recuerdo nefasto de este alemán que huyendo de la Alemania nazi fue capaz de hacer el mal en defensa de los intereses de su país de adopción, los Estados Unidos. No sin razón, Bernie Sanders le acusó de ser el secretario de Estado más destructivo de la historia de su país.

En España recordamos cómo el presidente del gobierno Carreo Blanco, murió en un atentado al día siguiente de entrevistarse con Kissinger, tras rechazar su demanda de abandonar el proyecto Islero. Así como su frenética actividad diplomática, para instigar la marcha verde en el Sahara Español, como demuestran de los documentos de WikiLeaks.

No creo que puedan tener mejor recuerdo en Chile. Allí también maniobró para el asesinato de Salvador Allende, el golpe de estado y la dictadura militar de Pinochet. Argentina también le debe su apoyo al golpe de estado y a los miles de muertos y desaparecidos de la dictadura de Videla. Por no hablar de su implicación en los miles de asesinatos en Indochina o de su apoyo al genocidio en Timor Oriental.

Cuando los intereses de una nación implican el genocidio de pueblos inocentes, tiene un serio problema. Como es posible que la nación que abandera el principio de la Libertad haya sido capaz de emplear a personajes de esta calaña para defender sus intereses geopolíticos. Quizás sea un iluso, pero no lo puedo entender. Desde luego los hispanos no somos así. Nuestro legado es muy diferente.

Tras la muerte de este ser sin escrúpulos… sin duda, hoy vivimos en un mundo mejor.

David López Gómez

3 de diciembre de 2023